Sexualidad, pareja y el Asistente Personal; un nuevo modo de trabajar la diversidad funcional

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Publicado el 23 marzo, 2016

FIDELAutor: Fidel Hernández Hernández. Doctor en Psicología Clínica y de la Salud. Experto en Terapia de pareja, familia y sexualidad.

Todas las personas cuando comienzan el despertar inevitable de su conciencia hasta su plenitud buscan a lo largo de la vida un número de metas, objetivos y realizaciones profesionales y personales con un único fin, ser felices y sobre todo estar realizado con lo que hacen y con quien viven. Cuando para lograr estas metas tenemos más obstáculos que los demás, como ocurre en el caso de las personas con diversidad funcional, el esfuerzo y la voluntad necesaria para alcanzar la autorrealización están estrechamente unido a un grado de madurez y conciencia que no siempre tenemos la mayoría de las personas. Sin embargo la sociedad moderna actual siendo la más avanzada desde el punto de vista científico y de modernidad ha generado de manera galopante una población cada vez más insatisfecha y poco realizada, con muy poco espacio para tolerar las diferencias y poco dispuesta a comprender que algunos segmentos de la población necesitarán más comprensión y apoyo para vivir integrados en el resto de la sociedad.

El reciente informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) en su Encuesta Continua de Hogares de 2015, relata cómo se agrupa para vivir la población española. Las cifras indican que los hogares unipersonales vuelven a aumentar, lo cual refleja el aumento paulatino de personas solas, en su mayoría personas mayores de 65 años y personas con discapacidad. Esto refleja el contraste fundamental de esta época donde vivimos en ciudades cada vez más pobladas y hacinados de personas que,  sin embargo, se sienten cada vez más solas.

Esto se hace más acuciante en el colectivo de personas con discapacidad ya que necesitan, en la mayoría de los casos, quien los asista y apoye para actividades de su vida diaria. Requieren unos servicios de atención especializada que aún son escasos.

En este contexto de desamparo social emerge la necesidad de la figura del asistente personal como herramienta indispensable que facilita la autonomía y la vida independiente de este colectivo.

El debate actual sobre la necesidad del Asistente Personal nos obliga a reflexionar acerca de los distintos componentes de esta figura y quiénes deberían financiar a este tipo de trabajadores. En el entorno Europeo ( Alemania, Francia, Bélgica..) el modelo de Asistencia Universal de servicios sociales aboga como un derecho que las personas con diversidad funcional tengan un asistente personal cuya financiación es responsabilidad del Estado. Incluso existen otras variantes del asistente personal como el Asistente sexual, cuya función y utilidad aún está sometido a debate público.

El asistente sexual para personas con diversidad funcional choca de a lleno con un muro de prejuicios y falta de conocimientos en el tema de la sexualidad, que se agrava más aún cuando hay que relacionarlos con personas con algún tipo de discapacidad o diversidad funcional. Los miedos, las represiones y el poco conocimiento sobre el bienestar y la sexualidad nos sitúan ante algunas interrogantes para desarrollar y promover la figura del Asistente personal y la modalidad del Asistente Sexual. ¿Cuáles son los límites profesionales y personales del Asistente sexual como elemento facilitador de la vida independiente para personas con diversidad funcional? ¿Cuáles pueden ser las posibles consecuencias de las relaciones interpersonales entre el asistente sexual y la persona con diversidad funcional?

Estas y otras interrogantes nos plantean un escenario rico y amplio para poder trabajar la figura del Asistente Personal como un elemento indispensable que contribuirá a favorecer la vida independiente y la autorrealización de las personas con diversidad funcional. Será necesario, de manera conjunta, trabajar la sexualidad como una vía de disfrute y bienestar que permita a los individuos con diversidad funcional poder tener una vida activa y plena desde el punto de vista personal y social.

La figura del Asistente personal aún carece de reconocimiento oficial y profesional ya que no aparece como una figura laboral en el catálogo de cualificaciones profesionales. Las Asociaciones y entidades que utilizan al Asistente Personal lo deben hacer bajo el rótulo de trabajadores domésticos.

La necesidad de dar respuesta profesional al colectivo de personas con diversidad funcional en áreas tan sensibles como la sexualidad, la pareja y la figura del Asistente Personal nos ha convocado a un grupo de profesionales a crear una nueva empresa social. Psicodis Orientación y Apoyo tiene como objetivo la atención psicológica y la asistencia personal a personas con discapacidad, así como la formación a instituciones e individuos en temas de Psicología, Sexualidad, Discapacidad, Pareja y Familia.

Las relaciones interpersonales y las relaciones de parejas así como la posibilidad de convivir con una sexualidad plena y una vida autorrealizada son interrogantes que tienen la mayoría de las personas, aunque en colectivos más vulnerables como las personas con discapacidad existen más tabúes y prejuicios para abordar el tema de la sexualidad y la pareja que en otros colectivos. Pero… ¿conocemos qué es el sexo, lo que significa sexualidad, lo que entendemos como pareja? ¿Caemos en el reduccionismo, que confunde sexo con coito y placer con orgasmo? Es por ello que desde nuestro trabajo terapéutico y formativo pretendemos responder y asistir sobre este tipo de cuestiones: que sexo y sexualidad son algo más de lo que comúnmente se piensa.

La sexualidad no se puede abordar solo como un hecho biológico y determinado por factores físicos, de ahí que no haya diferencias entre personas con o sin discapacidad en su manera de sentir y disfrutar las relaciones sexuales y de parejas. Todos somos personas sexuadas, sociales y con necesidades de amar, de ser aceptados y respetados, por ello nuestro trabajo terapéutico y de formación está dirigido a la vivencia de las dificultades que puedan surgir en hombres, mujeres, parejas y familias, así como la intervención sexológica terapéutica en aquellas parejas cuyo funcionamiento sexual no sea satisfactorio al menos para un miembro de la pareja acarreándole dificultades en las relaciones interpersonales, sociales y familiares.

La posibilidad de tener éxito con una pareja estable, duradera y la creación de una familia propia es uno de los mayores retos que tienen hoy en día cualquier persona en la edad adulta. Para los adultos con algún tipo de discapacidad, este reto se hace aún mayor ya que no solo se trata de aceptar la discapacidad en un plano público y social sino en el plano personal y privado. Se necesita aceptar la discapacidad del otro miembro de la pareja o familiar y se requiere una profunda capacidad de amar al otro desde sus capacidades y no desde sus limitaciones. Es necesario trabajar para quienes convivan en la vida privada y familiar con una persona con discapacidad en la cultura de un amor sin rótulos donde lo que importa es la virtud y la discapacidad se convierte en un reto a vencer cotidianamente.

Integrar el enfoque sexológico a una concepción de pareja y de disfrute del bienestar nos lleva a trabajar desde una perspectiva compleja, multicausal e integrada en el manejo de la vivencia, la satisfacción y el bienestar. Comprender que poseer una discapacidad no es una condición limitante. Para tener una vida plena desde el punto de vista sexual, social y de autorrealización personal es esencial realizar un enfoque terapéutico eficaz.

La posibilidad de ofrecer recursos terapéuticos especializados en el campo de la sexualidad y la pareja a personas con diversidad funcional constituye una vía para normalizar y garantizar mayor calidad de vida y salud mental y social a este colectivo.

Nuestro trabajo profesional desde Psicodis consiste en brindar una atención psicológica especializada a personas, parejas, familias y profesionales vinculados directa e indirectamente a la discapacidad. Promovemos comportamientos saludables en el plano afectivo, personal y laboral a las personas con diversidad funcional para reducir la diferencia existente en la sociedad entre las personas con o sin discapacidad facilitando una integración por igual de todos.

Nos proponemos la realización de cursos y talleres que aumenten el conocimiento sobre Psicología, Sexualidad, Parejas y Familias garantizando la integración y la aceptación de las diferencias.

Puedes leer el artículo completo en la Revista Sexpol, de información sexológica, enero/marzo 2016, número 120 páginas 25 y 26. -Leer-